Fecha: 16-03-2014.
Lugar: León.
Distancia: Media
Maratón (21,097 Km).
Tiempo: 1h56:27
(Oficial 1h57:31).
Precio: 15 Euros.
Comentario:
2ª Media maratón que
hacía en mi vida y la elegida para tal ocasión iba a ser la media de León, a la
cual le tenía bastante ganas ya que aparte de desarrollarse en una ciudad muy
conocida para mí, también tenía el aliciente de que la mitad del recorrido ya
lo conocía e iba a ser la primera media en la que participaba que se celebraba en
una capital de provincia, así que al final decidí inscribirme en esta prueba
pero en vez de marchar el mismo día de la competición, decidí reservar unos días antes habitación
para pernoctar en León y estar ya presente el mismo día de la competicion en la
ciudad y no tener que pegarme un madrugón con el consiguiente viaje hasta León.
Así que unos días
después de mi primera media a mediados de Febrero, me inscribí en esta carrera
y a los pocos días ya estaba reservando noche en un hotel que colaboraba con la
organización de esta media, el Hotel Conde Luna de León.
Enlace del hotel.
El día anterior a la
carrera, tras recoger a la mujer a las 14h puse rumbo a León, pasando primero por
el Ezequiel en Villamanín donde el menda tomó el clásico café con bayles.
Por si acaso había
dudas si se había llegado al destino correcto, esto fue lo primero que me
encontré al llegar a la ciudad de la carrera.
Llegamos entonces sobre
las 16h a León, donde tras dar alguna pequeña vuelta dimos con el hotel,
aparcando el coche a escasos 100 metros del mismo, al lado de la muralla.
Tras dejar las
bolsas (por los bultos que se llevaban parecía que el viaje era para una
semana...) nos fuimos a dar una vuelta por León.
Nos encaminamos hacia
el lugar de la salida para intentar ver la feria del corredor que tenía lugar
con motivo de la carrera, pero antes de llegar al
polideportivo donde tenía lugar dicha feria, vimos abierta la plaza de toros y
un cartel en su exterior anunciando una feria de stocks, así que para allá nos
fuimos.
La feria de stocks no
me interesaba nada, pero ya que la plaza (cubierta) de toros de León se
encontraba con las puertas abiertas, podía aprovechar para conocerla ya que
siempre que he pasado con el coche por su exterior siempre me preguntaba cómo
sería por dentro.
Acto seguido me dirigí
al polideportivo, pero eran en ese momento las 17h15 y la feria se encontraba
cerrada ya que abría a las 18h, así que entonces abandonamos el lugar y nos
dirigimos a la zona céntrica de la ciudad.
De todas formas he podido conseguir alguna imagen del interior del polideportivo con algún momento de la entrega de dorsales y la feria del corredor.
Tras dar algunas
vueltas por León nos sentamos a tomar algo en la plaza mayor, reuniéndonos a las 20h con
Maite y nos dirigimos entonces a tomar algo por el Húmedo antes de cenar en una restaurante
italiano.
Como yo quería cenar
pronto y encima quería cenar pasta por el tema de la carrera nos fuimos hasta
un restaurante italiano que había encontrado por internet, La Tagliatella.
Resulta que el local en
cuestión forma parte de la cadena del mismo nombre que tiene restaurantes
italianos repartidos por todo el mundo y encima uno en Oviedo, el cual ya hacía
algún tiempo que había visitado pero la verdad ni me acordaba.
Aunque las chicas eran
un poco reacias a abandonar la zona de vinos a hora tan temprana como eran las
21h aprox, el menda sabía que este día podía ser un poco problemático para el
tema de la cena en un italiano de León, aparte de por ser sábado también por
que se notaba la presencia de gente de fuera de la ciudad que iba a participar
en la media y que ese día iba a cenar por los restaurantes italianos de la
ciudad, así que cuando llegamos
al restaurante en cuestión ya había en torno a 10-15 mesas con gente cenando y
la mayor parte de la gente tenía pinta de corredores.
Nos situaron en una
mesa en el piso de arriba, yo creo que la única que estaba libre, ya que por su
situación quise cambiarla pero nos dijeron que el resto ya estaban reservadas,
así que si llego a hacer caso a las chicas este día hubiera cenado sobre las
23h30 o más tarde incluso.
Imagen del comedor.
Imagen del menda.
Los platos que pedimos fueron:
Ensalada de foie y
jamón de pato.
Unos Parpadelle con Salsa
Pescatora (salmón, frutos de mar, tomate, crema, picadillo de cebolla y
pimiento).
Esto fue lo que tomé yo
básicamente y estaba rico, aunque si que es verdad que dejé un poco ya que era
muy abundante el plato.
Y como tercer plato,
una Pizza Melanzana.
Con el agua, el vino y los
cafés pagué unos 55 Euros ya que invitamos a Maite a cenar.
Después de la cena ya
nos fuimos hasta el hotel (estaba a un par de minutos del restaurante),
llegando en torno a las 22h 30 y dispuestos ya a descansar hasta el día siguiente.
Una cosa que me llamó
la atención y que en Oviedo no pasa en estas fechas es el claro contraste de
las temperaturas en León en este día (si a la llegada a la ciudad el termómetro
marcaba unos 22 grados, pocas horas después hacía un frío que pelaba).
Amaneció al día siguiente y había pasado la noche despertándome
en numerosas ocasiones y decidí levantarme a las 07h30 ya que quería desayunar
un par de horas antes del comienzo de la carrera.
Lo primero nada más
levantarme fue asomarme a la ventana para ver el estupendo día que había amanecido,
pudiendo ver dos de los monumentos claves en León.
Por una parte la
catedral gótica, iniciada en el s. XIII.
Por otra parte la Casa
Botines, diseñada y construida por Gaudí entre 1891 y 1894.
Me acompañó entonces la
mujer a desayunar en el comedor donde ya
había numerosas mesas ocupadas con atletas desayunando.
Vista del comedor.
Desayuné un tazón de
cereales, un par de tostadas, un zumo y un plátano, así que tras zamparme todo
esto ya subí a la habitación para hacer algo de tiempo antes de poner rumbo a
la salida, situada en el Estadio Hispánico.
A las 09h45 me fui yo
solo para la salida ya que la mujer prefirió quedarse en este día soleado primaveral
en la habitación a esperarme para cuando llegara de nuevo a la misma para
ducharme (esto es lo más parecido a cuando las mujeres de los toreros padecen
la tensa espera en las habitaciones de los hoteles para cuando lleguen éstos
sanos y salvos, “pero no estresados diría yo…”, tras la faena cumplida por no
decir con otra cosa cumplida).
Tras quince minutos de
caminata por las calles de León, llegué a la zona del estadio donde ya había un
buenísimo ambiente para la carrera del día.
Entré en el pabellón
deportivo para ver el ambiente en su interior
donde tenía lugar la entrega de los dorsales y luego ya me dispuse a
salir al exterior, a la zona de la pista de atletismo para empezar a calentar
tranquilamente por dicha pista y por la zona del césped del propio estadio.
Lo primero que me llamó
la atención en el césped fue este globo que daba mucho colorido a la zona.
Otra cosa llamativa que
se estaba “cocinando” por esta zona exterior eran las lentejas que a la llegada
nos irían dando a los corredores.
Se observaba también a
la gente estirando y calentando por el guapo recinto del Estadio Hispánico de
León.
En el calentamiento me
noté bastante bien, sin ninguna molestia a nivel físico que para mí en esos
momentos era lo más importante a punto de comenzar la carrera.
A falta de unos minutos
ya me encaminé a la zona de la salida donde ya se estaba aglomerando la gente a
pasos agigantados.
Decir que en la salida
estábamos clasificados por colores, ya que cada dorsal aparte del número y del
nombre del corredor tenía un color de fondo diferente según el tiempo que se
había indicado a la hora de hacer la inscripción.
En mi caso y por haber
señalado el tiempo de 1h58 de la media de Llanera me dieron un color grisáceo
en el dorsal, así que tras seguir calentando unos minutos por la zona de la
salida ya me situé definitivamente en el cajón que me correspondía por mi
tiempo a esperar que la carrera comenzara (minutos antes había intentado
localizar a un chaval al que sigo por su blog, Maratonman, pero no tuve éxito en
su localización debido a la gran cantidad de corredores que había trotando por
la zona).
Pero antes de empezar a
narrar la carrera en sí de la media quisiera empezar a poner algunas cosas de la
misma.
Cartel anunciador de la
carrera.
Recorrido, via
satélite, de la VI Edición de esta media de León.
Otra vista del
recorrido.
Perfil del recorrido.
Dieron entonces la
salida y tranquilamente empecé a correr con la debida precaución de no tropezar
con algún corredor.
No tuve ningún problema
en estos primeros centenares de metros, simplemente me dejaba llevar con la
marea de corredores por esa primera recta que nos iba a llevar a la glorieta de
la plaza de toros de León para pillar la C/Corredera que en ascenso nos iba a
llevar a los corredores a dar con la C/Independencia,
lugar donde estaba situado el hotel.
Foto en la
C/Independencia, pudiéndose observar que salgo borroso (soy el de rojo por si
alguien no se da cuenta o no me conoce…) debido a que la cámara no fue capaz de
enfocarme correctamente debido a la tremenda velocidad de despegue que llevaba
en el inicio de la carrera.
Las piernas iban bien y
el corazón lo mismo, así que intenté ver el tiempo que hacía en el panel del
primer kilómetro (por ver el ritmo más que nada al que iba en este inicio de la
carrera), pero este intento fue en vano
ya que no localicé dicho panel a pesar que yendo caminando hacia la salida lo
había visto y sabía por dónde estaba situado.
Al pasar la carrera por
la calle del hotel pasé corriendo por el margen derecho en el sentido de la
carrera por si acaso a la mujer se le había ocurrido bajar para ver la carrera
desde la entrada del hotel en cuestión y así que me pudiera hacer alguna foto
pero la verdad ahora que lo pienso mientras escribo tampoco se trataba de pedir
“peras al olmo”, así que al no verla asomada continué corriendo al mismo ritmo
que llevaba en busca del giro a la Avda Ordoño II.
Tras esta C/
Independencia tocaba giro a la Avda Ordoño II donde he podido conseguir un par
de imágenes de dicho giro. (Dar las gracias a los fotógrafos por tomarse la
molestia de intentar retratar a todos los corredores).
En esta primera foto se
me ve entre el pelotón llegando al giro en cuestión.
Ésta foto se podría
titular algo así como …¡Seguidme todos que soy la luz que ilumina vuestro
camino…!.
Se entraba entonces en
el tramo adoquinado de esta Avda de Ordoño II, con el ritmo y la marcha estable. (¡Cómo para no llevarlo si llevaba tan solo algo más de 1
km y me quedaban solamente 20 Km para finalizar!).
Me notaba bien, cómodo
y cuando pasé por el panel del 2º km vi que llevaba un tiempo ligeramente
superior por unos segundos a los 11 minutos, así que la medía de 5:30 m/km
estaba bien para lo que esperaba en esos inicios de la carrera.
La carrera salía a la
Av. Condesa Sagasta donde la marcha ya se hacía algo más fluida que al
principio de la carrera ya que dicha avda es una de las arterias principales de
León, ensanchándose entonces la misma, cosa que se agradecía así que la carrera iba en
busca de la zona del Parador de San
Marcos, encontrándome en todo momento en estos tramos bastante bien y cómodo en
mi zancada.
Al fondo se oía la
música que tocaba una banda de música para animar a los corredores en esta
media maratón, habiendo más puntos de animación puestos por la organización a
lo largo del recorrido.
Tocaba ahora un par de
km en una recta que se dejaba notar algo en las piernas por el viento que
tiraba en contra y porque era en sentido ascendente y en la cual me seguía
encontrando bastante bien.
Mi paso por el 5º km
fue unos segundos por debajo de los 27 minutos, paso algo mejor al que esperaba
ya que en Llanera había pasado en 27:30, pero aún así me iba encontrando muy
bien, así que tras coger un botellín de agua y pegar dos o tres sorbos en este
avituallamiento, seguí con la misma la marcha y después de algún centenar de
metros desde este paso ya tocaba giro a la derecha para ir en busca de una de
las subidas más pronunciadas de la carrera, la de la C/ Unicef, la cual nos iba
a llevar a todos los corredores al paso por el 6º km.
En esta ocasión, dicha
subida me pareció más liviana que cuando la subí en la carrera de 10 Km de
Octubre del año pasado en esta misma ciudad.
Ahora tocaba la recta
opuesta a la anterior de 2 km, la cual aparecía en un primer momento con un
tramo llano y luego poco a poco, ésta, se iba convirtiendo en ligero descenso que se agradecía mucho en las piernas.
En estos km anteriores
se notaba un poco el viento en contra que tiraba, así que de vez en cuando me
refugiaba detrás de algún corredor e iba “chupando rueda como se diría en el
argot ciclista” para evitar que me pegara de frente y me fuera desgastando más
de la cuenta.
En esta recta mantuve
un ritmo continuo ya que no quise incrementar el mismo por ser una carrera muy larga
y quedar todavía muchos kilómetros.
Tras un corto y fuerte
descenso que daba un respiro a todos los corredores se entraba de nuevo en el
casco urbano de León buscando la zona de la catedral,
punto en el que estaba el paso cronometrado del km 10.
Tanto en la anterior
carrera como en ésta se me dio muy bien el tránsito corredero por estas calles
que menciono anteriormente.
Más o menos en la
C/Sueros de Quiñones, lugar donde estaba situado el paso por el km 9, me dio
por empezar a comer algunos dátiles, costumbre que no tengo muy clara si
seguiré poniéndola en práctica o si intentaré encontrar alguna forma más cómoda
de suministrarme en carrera algo de energía extra ya que notaba que me costaba
algo comer mientras corría.
Seguí entonces detrás
de unos chicos en esta calle anterior que me servían un poco de referencia y al
llevar un ritmo similar al mío se puede decir que me iban sirviendo de liebre.
Esta calle y alguna
después me iban a llevar al tramo adoquinado en ascenso de la C/ Ancha, la cual
subí muy bien para como la había subido el año pasado.
Tras un brevísimo
rodeo, la carrera me iba a llevar a la plaza de la catedral, paso del km 10.
En este punto marqué un
tiempo de 53:40 (oficial de 54:44), tiempo 01:50 inferior al paso por el mismo
punto kilométrico de la media de Llanera.
Me sentía bien, no muy
cansado para lo que tenía que estar para llevar ese tiempo en el paso de 10 Km
en una media, ya que mi récord de los 10 Km está en estos dos años en 51:35.
Como sabía que pasaría
de 1h50 me puse entonces como motivación y como objetivo bajar de 1h55, un
tiempo que pensaba que se aproximaba bastante más a lo que puedo dar en mi
estado actual de forma.
Tras este paso, otra
vez ligerísimo descenso que se dejaba notar para llevar a las calles de la
parte trasera de la catedral.
Foto de dicho descenso
al poquito de pasar la plaza de la catedral de León.
Tras el descenso tocaba
de nuevo avituallarse con agua, apareciendo entonces las primeras muestras de
pérdida de fuerzas, así que tocaba de nuevo tomar algunos dátiles para
recuperar hidratos perdidos, recuperación que a los pocos centenares de metros
se dejaba notar en las piernas.
Notaba que iba
corriendo tras tomar los dátiles haciendo de vez en cuando “la goma” (otra vez
recurro al argot ciclista…).
A partir del Km 12 iban
aparecer algunas pequeñas molestias en la parte exterior de la rodilla izda,
así que ya empezaba a saltarme la voz de alarma, pero como de momento no
parecían ir a más y tampoco me molestaban en exceso, renuncié a bajar el ritmo
y seguí con el mismo ritmo que llevaba desde hacía algunos kilómetros.
Me tocaba ahora correr
por una zona que no conocía de León, así que me empezaba a conocer uno de los
alicientes para mí de esta carrera.
En esta zona que me
tocaba correr y que me llevaría hasta el km 15, notaba como poco a poco me iba
desgastando pero tampoco era una cosa que me pareciera preocupante de momento.
Desde ya hacía
bastantes kilómetros tenía de referencia unos 50-100 metros por delante a una
chica que parecía llevar un ritmo parecido al mismo y a la cual le seguía la
pista, así que iba intentando no perder comba con ella.
El paso por el km 15 lo
hice en algo más de 1h20, así que todavía estaba en los márgenes para hacer por
debajo de 1h55.
Me quedaban 6 km y
estaba a punto de llegar el tramo del km 15 al 18, tramo que se suele hacer
bastante durillo para muchos corredores (sería como el “muro” en la maratón
pero en este caso en una media).
Tras el km 15, la
carrera iba a internarse en una especie de paseo “estilo Fuso la reina” en el
cual iban a tener su recorrido estos 3 km.
En estos 3 km iba
notando como me iban poco a poco abandonando las fuerzas pero aún seguía sin
aminorar mucho el ritmo intentando seguir a los que me precedían.
Un par de fotos en este
tramo y como se ve en la segunda foto, mi cara muestra un poco el sufrimiento
que llevaba para no descolgarme de la pareja que me precedía.
Hasta el km17 se puede
decir que lo iba consiguiendo sin problemas alarmantes, pero a partir del km 17
la alarma saltó y este bajón físico se hizo muy real partir del km 18.
Los 3 km finales se me
hicieron muy duros, tan duros que fui poco a poco adelantado por numerosos
corredores.
Notaba que iba llevando
un ritmo, yo creo, bastante por encima de los 6 minutos/km, pero no tenía más remedio
que aguantar tan solo 3 Km (pensaba que solo me quedaba otra serie de esas
cómodas que suelo hacer en el gimnasio de 20 minutos, cosa que me animaba).
Pero una cosa era lo
que se me venía a la mente para animarme a continuar y otra la realidad, la
pérdida de fuerzas y la pesadez de los gemelos en la zancada.
Renunciaba a parar y a
caminar como había visto hacer a algunos corredores, así que por las
sensaciones que iba teniendo sabía que iba bastante por encima de lo que
hubiera tenido que ir en ese tramo de la carrera, pero el tema era no parar y
continuar corriendo, aunque fuera trotando.
A partir del km 18 ya
se iba adentrando la carrera de nuevo en algunas de las calles de León por lo
que ya iba apareciendo algo de público que la verdad animaba bastante a los
corredores, cosa que se agradecía, sobre todo cuando uno iba jodidillo en esos
tramos finales de la carrera.
Por el tiempo que iba
viendo que llevaba en el km 17 ó 18 ya sabía que estaría por encima de 1h55,
así que tocaba marcarse otro objetivo, intentar hacer mejor marca personal en
la media.
Aparentemente no tenía
que tener demasiados problemas para conseguirlo ya que tenía un margen de más
de 3 minutos para poder bajar de 1h58:44, así que tocaba seguir corriendo y
sobre todo tocaba aprender a sufrir un poco para poder aplicarlo a futuras
carreras.
Llegó el último km y al
poco ya vi la rotonda de la plaza de toros de León que daba acceso a la calle
para entrar en el estadio, vista que me alivió un poco y me hizo incrementar un
poco el ritmo.
Di la vuelta a esta
rotonda y enfoqué C/El Paseo el Parque para torcer a la derecha y enfocar los
últimos 100 metros de la carrera que transcurría por la pista de atletismo del
estadio.
¡Uno, dos, uno, dos, puffffff, les pego una pasada a éstos y ya estoy en meta! (Se puede observar la mirada de asombro del tercero del grupo ante la pasada que les metí en esos momentos).
¡Uno, dos, uno, dos, puffffff, les pego una pasada a éstos y ya estoy en meta! (Se puede observar la mirada de asombro del tercero del grupo ante la pasada que les metí en esos momentos).
Decir que al girar para la pista oí una voz conocida que me animó al grito de “Ánimo, Marras”,
siendo esta voz la de Maite ya que se había animado a ir a la llegada para ver como
finalizaba el menda la prueba.
El último centenar de
metros ni me molesté en sprintar, simplemente entré trotando, dejándome llevar
por el ritmo que llevaba, marcando un tiempo neto de 1h56:27 y oficial de
1h57:31 (por lo que se ve había habido un desfase de 01:04 en mi paso por meta
a la hora de la salida).
Foto que me sacaron
nada más entrar en la pista de atletismo.
Entrada en meta.
Llegué muy cansado,
bastante más que en la media de Llanera, pero a pesar del cansancio había
disfrutado de la carrera.
Creo que se debió a que
el recorrido era algo más durillo que en la primera que corrí y quizás algo se
notó el paseo de casi 5h que tuve la tarde anterior por León.
Con esto no digo que
hubiera hecho un tiempo unos minutos por debajo de la marca que realicé pero si
que quizás las sensaciones al finalizar la carrera hubieran sido otras.
De todas formas
disfruté mucho la carrera y aunque lo pasé mal el tramo final de la carrera, si
que es verdad que me gustó bastante la segunda parte del recorrido de esta
media, zona de León que desconocía por completo como dije anteriormente.
Nada más llegar fui a
por un bote de aquarius y cuando vi un hueco en un banco para allá me fui enseguida
para beber dicho bote e ir recuperando algo de las fuerzas que había perdido
durante la carrera.
Decir que en zona de la
llegada habían colocado numerosos bancos dispuestos para que los corredores
pudieran sentarse y descansar.
Cuando llegué yo a esta
zona estaban casi todos ocupados e incluso había bastantes corredores sentados
por el suelo recuperándose del esfuerzo.
Después de beber el
aquarius me senté en el suelo para estirar un poco y tras estos estiramientos me
quite el chip para entregarlo a la organización para que me dieran la bolsa del
corredor, bolsa que contenía una barrita energética, un botellín de agua, una
manzana, propaganda de alguna empresa y de algunas carreras futuras y también
por último contenía algún vale para canjear en alguna tienda de León.
Tras recoger la
bolsa, seguí paseando por esta zona para llegar a la zona donde daban lentejas
o más bien “caldo de lentejas” y trozos de empanada, renunciando a pillar algún trozo de empanada.
Estuve un rato por la
zona del césped viendo llegar al resto de corredores que todavía no había
entrado en la meta y acto seguido ya fui a buscar a Maite que estaba en el
mismo lugar en el que me había saludado.
Nos fuimos entonces al
hotel para encontrarnos con la mujer y para que yo me duchara.
En cuanto al hotel y la
habitación decir que no me gustaron para nada, así que si tengo que volver a
pernoctar en León algún otro día este hotel está completamente descartado para
esa posible pernocta.
El hotel se notaba que
era antiguo y creo que necesitaría de unos aires nuevos por completo, tanto en
los pasillos como en las habitaciones o por lo menos en la que nos dieron.
Nos cobraron 65 Euros
por la habitación doble con desayuno buffet.
Como era el hotel que
colaboraba con la organización de la media maratón me dejaron hacer la salida
del hotel en torno a las 14-15h para que me diera tiempo ducharme y a su vez el
día de la llegada ya teníamos el dorsal (me tocó el 1107) con el chip y la
camiseta en la recepción del hotel.
En cuanto a la prueba
me gustó mucho, tanto por ambiente como por la organización y sin duda que repetiré
si no me surge ningún contratiempo el próximo año.
La zona de la meta
estaba más puesta y más organizada que en otras carreras en las que he corrido
estos últimos meses, siendo esto más o menos normal al tratarse de una media de
una capital de provincia como es León.
Después de dejar el
equipaje en el coche ya nos dirigimos al Húmedo a tomar y a comer algo,
llegando a casa sobre las 18h30.
Clasificaciones:
Clasificaciones:
Dorsal | Nombre | Apellidos | Localidad |
---|---|---|---|
1107 | JOSE MANUEL | MARRAS RODRIGUEZ | OVIEDO |
Puesto Gen. | Tiempo Oficial | Tiempo Neto | Club |
1286 | 01:57:31 | 01:56:27 | |
Categoría | Sexo | ||
VETERANOS M-40 MASC | Masculino |
DISTANCIA | 21097 M | ||||||||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
RITMO | 0:05:35 | ||||||||||
RITMO REAL | 0:05:32 | ||||||||||
KM 10 | 0:54:44 (TIEMPO OFICIAL) - 0:53:40 (TIEMPO NETO) | ||||||||||
PUESTO SEXO | M- 1196 | ||||||||||
PUESTO
Resultado de JOSE MANUEL MARRAS RODRIGUEZ en:
|
D1107 | |
JOSE MANUEL MARRAS RODRIGUEZ | |
Puesto: | 1286 |
---|---|
Tiempo: | 01:57:31 |
Entrada en meta:
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=l-E_655ET68&list=UUVVtFx2-Ra1JpybJoFufHiA