Días: 20 y 21 Junio
2015.
Lugar: Fuente De
(Cantabria).
Comentario:
Escapada de un par de
días, acompañado de la mujer, que hice a una zona que me encanta como es la
Liébana en Cantabria y en la que nos alojaríamos en un lugar en el que siempre
le había tenido muchas ganas, El Parador de Fuente De.
Relato a continuación
lo que dieron de sí este par de días…
1º Día…
Oviedo – Fuente De .
Ruta: Estación superior
teleférico Fte De – Collado de Fte Escondida.
Desnivel: 200 m.
Duración: 4 h
aproximadamente con múltiples paradas.
Comentario:
El viaje nos lo íbamos
a tomar con mucha tranquilidad (el viaje en fechas pasadas a Galicia me ha
cambiado por completo la mentalidad), así que renunciamos a madrugar como otras
veces y a las 07h45 el menda ya se estaba levantando y tras prepararnos,
salimos con el coche a las 08h15 camino de la parada que tenía pensado hacer
para desayunar en la cafetería habitual de Unquera.
Preparado para
disfrutar como un enano del desayuno.
Tras la parada en
Unquera ya proseguimos con la marcha llegando a Fte De en torno a las 11h15.
En el aparcamiento,
mientras preparábamos la mochila, la primera anécdota del día iba aparecer ya
que al posar la maleta de ruedas para llevarla a la recepción del parador,
resulta que la misma se nos escapó rodando por el aparcamiento por lo que la
mujer tuvo que salir corriendo detrás de ella unos cuantos metros.
Mientras ella avisaba
en el parador de que ya estábamos por la zona, este menda acababa con los
preparativos de la mochila, así que acto seguido nos dirigimos al teleférico
para ponernos a la cola para subir.
Una hora de espera nos
dijeron en el parador que tendríamos y la verdad prácticamente ese fue el tiempo
que estuvimos en la cola y ante la idea que se me pasaba por la cabeza ante dicha
espera de subir pateando y que la mujer montara en la cabina, hay que decir que
se negó en rotundo ante lo que desistí de mi sugerencia vista su rotunda negativa.
Por otra parte, me
encontré este año con que las taquillas donde habitualmente se recogían los tickets
para subir se encontraban cerradas y tuvimos que sacarlas en la cabina de
acceso al mismo teleférico (supongo que habrán recortado personal por el tema
de la crisis…).
Tras unos 03:30 min de
trayecto ya estábamos en la parte superior del teleférico a una altitud de unos
1.830 m.
La zona resulta muy
conocida para mí, así que la vistas no me sorprendieron, aunque siempre resulta
guapo volver a pisar esas latitudes.
Vista desde el mirador
del teleférico de toda la zona de aparcamiento, así como del Parador de la
zona.
La primera dirección
que tomaron mis ojos fue la zona de Peña Remoña (2.229 m) a la izd, la Torre
Salinas (2.448 m) en el centro y la Padiorna (2.319 m) a la derecha.
Saliendo ya del
teleférico y con vistas hacia la zona de Peña Vieja (2.614 m) y Horcados Rojos
(2.506 m).
Vistazo hacia la
vueltona.
Fuimos subiendo por la
pista en dirección a la Horcadina de Covarrobles y con vistas hacia atrás de
toda la Canal de S.Luis, la Padiorna (2.319 m) y la zona del Pico S. Carlos
(2.390 m) y Torre de Altaiz (2.335 m) y el lugar al que acabaríamos llegando
(pto rojo).
En la Horcadina de
Covarrobles me asomé para ver la situación del Macizo Oriental y despejar dudas
de la posible nieve que pudiera haber en el mismo.
Canal de S. Luis.
Tomamos dirección a la
Vueltona, pasando entonces por delante de los Pozos de Lloroza a la izd de la
marcha.
A la drcha se podía
observar a un escalador en su tentativa por ganar metros a la pared.
En la Vueltona
(primeros neveros haciendo acto de presencia en esta zona…), obviamos el desvío
que se dirigía hacia la zona de Horcados Rojos, prosiguiendo entonces por la
pista en dirección al Collado de Fuente Escondida.
Aquí Noelia se me quejó
del estado de sus botas y la verdad mirando las mismas se puede decir que
estaban en las últimas ya que a cada paso éstas iban perdiendo parte del caucho
que tenían, así que con este “pero” seguimos el resto del día transitando por
la zona y viendo como a medida que avanzaba la ruta, el desgaste era cada vez
mayor.
En nuestro tránsito,
nos encontramos algunos neveros como por ejplo este en que se ve a la mujer
pasando el mismo.
Seguimos dirección hacia
el Collado de Fte Escondida y a medida que ganábamos metros, los Pozos de
Lloroza se veían cada vez mejor, así como la Canal de S. Luis.
Y por delante de
nosotros, algunos picos que nunca he subido, la Torre de Altaiz (2.335 m) y el
Pico S. Carlos (2.390 m) y la Torre del Hoyo Oscuro (2.417 m) a la drcha de
éstos.
Al lado de la pista
algunos neveros iban aparecieron como este que en su extremo tendría unos 3 – 4
m de espesor.
Torre de Altaiz (2.335
m) y Pico S. Carlos (2.390 m).
Llegaríamos entonces al
Collado de Fte Escondida donde estaríamos un buen rato.
Mientras Noelia tomaba
el sol, fui a investigar por la zona, pudiendo sacar fotos como…
Sector de Picos de Sta
Ana (casi 2.600 m los dos) a Peña Vieja (2.613 m) con el Collado de la Canalona
separando dichos picos desde el collado en el que estuvimos parados.
Pico Tesorero (2.570
m).
Torre de Horcados Rojos
(2.506 m).
Zona de la Torre del
Hoyo Oscuro (2.417 m) y del Madejuno (2.513 m).
La zona de la Canalona.
Noelia con los Horcados
Rojos (2.506 m) y Pico Tesorero (2.570 m) por detrás.
El menda.
Ascendí unos metros por
un sendero pedregoso, previa visita a un nevero, sumamente resbaladizo, pero que no me daría muchos
problemas para ganar unos 40 m por encima del lugar de donde estaba Noelia.
Saqué esta foto de los
picos que estaban en este sector a mi espalda.
Numerosos neveros en el
Hoyo Sin Tierra.
Algo más cercana el
principio de la subida a la Torre de Altaiz (2.335 m) con neveros
obstaculizando el paso en su parte inicial.
Descendí de nuevo al
lugar donde estaba Noelia, aprovechando entonces a sacarme un par de fotos con
la zona y el menda.
Pico Tesorero (2.570 m)
con zoom.
“El Primate de Fte De”
tallado en la roca y por encima de la pista.
Dimos entonces la
vuelta, teniendo que cruzar de vuelta algunos de los neveros que nos habíamos
encontrado en la primera mitad de la ruta.
Imagen de uno de ellos.
Fuimos descendiendo en
plan paseo y disfrutando de las vistas que no por ser conocidas, no dejaban de
ser espectaculares como esta de los Pozos de Lloroza con la salida de la Canal
de la Jenduda (flecha roja), bajada a Fte De.
Zona de la Vueltona
vista en el descenso con las laderas plagadas de millones de piedras.
Ya en el tramo llano de
la pista y en busca del teleférico, de nuevo los Pozos de Lloroza con la Canal
de la Jenduda (pto rojo).
Cumbre de la zona
destacando entre el verde de los prados de esta zona del Cable, que es como
también se conoce a la estación superior del teleférico.
Ya muy cercanos al
teleférico, me desvié en solitario unos metros para sacar algunas fotos un
tanto diferentes a las que he sacado en otras ocasiones.
Llegamos sobre las
17h30 a pillar el teleférico (el último viaje era a las 18h), no pudiendo tomar
nada en el bar ya que estaban cerrando, así que nos fuimos directamente a
pillar la cabina de bajada mientras esperaba, mataba el rato sacando algunas
fotos de la cabina que tendríamos que coger que en esos momentos estaba
subiendo.
Un par de fotos de la
cabina ascendiendo.
El estado en el que
quedaron las botas después de la excursión.
Tras bajar del
teleférico, pusimos ya rumbo hacia el Parador, donde nos dieron la habitación
206, habitación que resultó muy de mi gusto y como nota de la misma destacaría
la absoluta tranquilidad que reinaba en el balcón de la misma oyendo en todo
momento los sonidos de los pájaros.
La habitación que nos
dieron.
Vista desde el balcón
de la misma.
Tras ducharnos y
descansar un rato en la habitación, bajamos para el bar para intentar que nos
dieran la copa de bienvenida, copa que nos resultó imposible tomar ya que tan
solo había una camarera atendiendo en esos momentos el bar como el restaurante.
Aproveché en estos
momentos para sacar una foto sacada del Parador del año 1966.
La intención era
acercarnos hasta Potes para cenar ya que había reservado en un restaurante al
que le tenía muchísimas ganas, “Casa Cayo”, así que tras salir de recepción y
sacar este par de instantáneas pusimos rumbo a Potes.
Llegamos a Potes y
aparcamos sin problemas en el amplio aparcamiento situado al lado de la iglesia
del pueblo.
Pusimos rumbo a la zona
de arcos antiguos donde había algunos pub, descubriendo entonces uno llamado “La
Soldrería”, el cual parecía tener buena terraza y buen ambiente, así que para
allá nos fuimos antes de cenar.
“La Soldrería”.
El menda en dicha
terraza.
Plantel de cervezas que
tomamos.
Acto seguido nos
dirigimos a “Casa Cayo” para cenar y se notaba que dicho lugar es uno de los
clásicos en Potes, habiendo mucho ambiente en el interior y exterior del mismo.
Enlace de dicho restaurante.
Tras tomar unos vinos
típicos de la zona, pasamos a cenar en la que nos iban a servir una ración de
morcilla de arroz, cordero (paletilla) y de postre, uno de los típicos de la
zona, el cual estaba muy rico.
El menda sentado a la mesa en el restaurante.
El menda sentado a la mesa en el restaurante.
Foto del postre.
Para beber, tomaríamos
una botella de vino Muga y junto a un par de cafés nos iban a cobrar poco más
de 50 Euros.
Me gustó mucho dicho
lugar, lugar al que no podría poner ningún “pero” en la visita de este día.
Regresamos a Fte De, en
mi caso, un poco perjudicado por el tema bebida, pero hay que decir que regresé
despacio, por lo que al llegar al hotel, todavía tendría el humor de sacar un
par de fotos del mismo.
En esta ocasión y para
diferencia de otros días, fue acostarme y quedarme dormido inmediatamente.
Desconozco las causas, aunque igual la bebida tuvo un poco que ver en esta ocasión.
Desconozco las causas, aunque igual la bebida tuvo un poco que ver en esta ocasión.
Al día siguiente tenía
pensado hacer una ruta fácil y corta en playeros, dado que las botas de la
señora ya no estaban para utilizarse, pero eso es otra historia y para otro
post…
¡Continuará…!.
